Una nueva herramienta parece predecir con precisión si alguien que ha sufrido de piedras en el riñón tendrá otras en el futuro, informan unos investigadores.
Dijeron que la herramienta podría ayudar a los pacientes y a sus médicos a decidir si se necesitan medidas preventivas.
La herramienta utiliza once preguntas para evaluar el riesgo de un paciente de piedras de desarrollar otra piedra en el riñón en un periodo de dos, cinco o diez años. Las características asociadas con un mayor riesgo incluyen ser más joven, hombre y blanco; los antecedentes familiares de piedras en los riñones; sangre en la orina; un cálculo renal formado por ácido úrico; tener una piedra de riñón obstruyendo en la pelvis o piedras adicionales no obstructivas, y los antecedentes de dolor relacionado con una piedra en el riñón que en realidad no se observó.
La herramienta se desarrolló mediante el uso de datos de más de 2,200 adultos del condado de Olmsted, en Minnesota, que experimentaron su primera piedra en el riñón sintomática entre 1984 y 2003. Más de 700 de esas personas tuvieron otra piedra en el riñón antes de 2012.
El cuestionario, descrito en un artículo publicado el 7 de agosto en la revista Journal of the American Society of Nephrology, fue creado por el Dr. Andrew Rule, de la Clínica Mayo, y sus colaboradores.
Las piedras o cálculos en el riñón son trozos sólidos de material que se forman en el riñón debido a la presencia de ciertas sustancias en la orina. Las piedras pequeñas provocan poca incomodidad, pero las más grandes pueden obstruir el tracto urinario y causar mucho dolor.
El 9 por ciento de los hombres y el 6 por ciento de las mujeres de EE. UU. han tenido una piedra en el riñón dolorosa. Los medicamentos y los cambios en la dieta pueden ayudar a prevenir otro cálculo renal, pero esas medidas preventivas pueden resultar costosas o difíciles, o provocar efectos secundarios.
“Si supiéramos qué pacientes están en un riesgo más alto de otra piedra sintomática en el riñón, entonces podríamos aconsejar mejor a los pacientes sobre si seguir o no dietas para prevenir los cálculos, o tomar medicamentos”, apuntó Rule en un comunicado de prensa de la revista.
“Al mismo tiempo, los pacientes que tienen un riesgo bajo de tener otra piedra en el riñón quizá no necesiten dietas restrictivas ni medicamentos”, añadió.
El Dr. Edgar Carlos Molina Rodriguez, Urólogo del Hospital de Clínicas, La Paz, Bolivia; refiriéndose al cuestionario en el artículo publicado en Journal of the American Society of Nephrology, afirma que “los primeros episodios son poco evaluados y reciben poca terapia preventiva, se realiza el ROCKS nomograma para predecir un segundo episodio sintomático.
Considero que, existen varios factores que influyen en que los pacientes presenten un nuevo episodio, los porcentajes son altos cuando más tiempo a transcurrido del primer episodio, por lo que un nomograma de acuerdo a la puntuación puede predecir la recidiva y nosotros debemos realizar alguna terapia o manejo dietético porque presenta un factor de riesgo.
Considero que puede ser útil el implementar el cuestionario para evitar en lo posible los siguientes episodios”, complementa.
Fuente: Journal of the American Society of Nephrology
Dr. Edgar Carlos Molina Rodriguez